UNEF cifra entre 3.000 y 4.000 MW la instalación de potencia fotovoltaica en 2019 y 300–400 MW de autoconsumo

Redacción.- La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha compartido las principales cifras de evolución del sector fotovoltaico durante 2018, las cuales ponen de manifiesto según esta patronal que la fotovoltaica ya es la forma más barata de producir electricidad para aquellos países con buen recurso solar. Es la principal conclusión de la presentación de su Informe Anual.

El liderazgo de la fotovoltaica en la expansión de las renovables se debe sobre todo a la cada vez mayor competitividad económica de esta tecnología, que ha reducido sus costes hasta un 95% en la última década y que todavía tiene margen para seguir abaratándolos en los próximos años. Este factor ha supuesto un nuevo récord mundial de nueva potencia fotovoltaica instalada en 2018, que ha alcanzado los 94,2 GW, un 0,5% más de lo instalado en 2017 y un 31% más respecto a 2016. En el panorama internacional, que ya cuenta con un total de 480 GW de potencia fotovoltaica acumulada, China sigue siendo el motor fotovoltaico del mundo.

Gracias al nuevo marco legislativo comunitario, ha sido el año más relevante en la última década a nivel europeo. El sector consolidó su tendencia de crecimiento en 2018 con 11,3 GW nuevos instalados, lo que supone un 23% más respecto a 2017 y permite alcanzar la cifra de 125,8 GW de potencia fotovoltaica total acumulada. El país que más potencia instaló fue Alemania (2,95 GW) y en cuanto al total de potencia acumulada, los países que se encuentran en el top 5 son: Alemania (45,9 GW), Italia (20,11 GW), Reino Unido (13,4 GW), Francia (9,4 GW) y España (5,1 GW).

En el ámbito de la política energética, cabe destacar la aprobación de las directivas y reglamentos del paquete Energía Limpia para todos los Europeos, en las cuales se aumentaron los objetivos a 2030 al 32% para las renovables y hasta el 32,5% para la eficiencia energética; se reconoció el derecho al autoconsumo sin cargos, la eliminación de las barreras administrativas y regulatorias a estas instalaciones y a los PPAs y la prohibición de la retroactividad.

En este sentido, la fotovoltaica continúa creciendo en España de la mano del autoconsumo: de los 262 MW nuevos instalados en 2018, el 90% corresponde a este tipo de instalaciones, mientras que el 10% restante (26 MW) proviene de plantas fotovoltaicas conectadas a la red. En comparación con 2017, cuando se instalaron 135 MW nuevos, la potencia fotovoltaica instalada en 2018 ha aumentado un 94%. Así, España ya alcanza los 5,1 GW de potencia fotovoltaica acumulada, situándose como el quinto país europeo con más gigavatios.

Este crecimiento del sector fotovoltaico ha generado un impacto positivo también a nivel económico y social. La contribución del sector fotovoltaico al PIB nacional ha crecido un 19% con respecto a 2017, situándose en 5.119 millones de euros (un 0,22% sobre el PIB total), y el número total de empleos generados superó los 29.000, registrando un aumento del 19% con respecto al año anterior. Asimismo, el impacto económico de las exportaciones ha alcanzado los 1.522 millones de euros, creciendo un 30% respecto al año anterior.

En el ámbito de la política energética, los hitos a destacar de 2018 son la presentación del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), que establece un objetivo de 27 GW nuevos de potencia fotovoltaica a instalar para 2030, y la aprobación del Real Decreto-Ley 15/2018, que ha supuesto un cambio radical de paradigma para el autoconsumo, al reconocer el derecho a autoconsumir energía eléctrica sin cargos, el derecho al autoconsumo compartido, la simplificación administrativa y técnica, la seguridad jurídica y la no retroactividad.

En 2019 se espera la instalación de entre 3 y 4 GW de proyectos fotovoltaico y, actualmente, de todos los proyectos fotovoltaicos que han solicitado los permisos de acceso y conexión a la red, hay 43,6 GW autorizados y 69,1 GW en proceso de tramitación, según datos de REE. Respecto a la nueva potencia, el sector reafirmó su compromiso para tomar las acciones necesarias para reducir su impacto en el medioambiente e incluso revertirlo en acciones positivas a nivel local y global.  Mirando al futuro, UNEF ha remarcado la importancia de contar con un procedimiento de acceso y conexión a la red transparente, ágil y que garantice la igualdad de condiciones para todos los actores.

Asimismo, señaló como necesaria la revisión de la remuneración de la generación para dar señales a largo plazo que atraigan la inversión, facilitando la firma de contratos PPA, revisando el diseño del mercado marginalista e introduciendo subastas homologables internacionalmente. Además, se remarcó la importancia de blindar la rentabilidad razonable de las plantas existentes en el 7,398% actual, lo que trasladaría un mensaje de estabilidad regulatoria.

En cuanto al autoconsumo, la previsión a futuro es que siga creciendo a ritmo sostenido. Bajo el nuevo marco regulatorio liberalizado, sin las barreras del RD 900/2015, se espera que se instalen unos 300/400 MW nuevos anuales. A este respecto, se hace necesaria la finalización de la regulación de detalle de la compensación de excedentes y del autoconsumo colectivo y la implantación del registro de autoconsumo, así como la regulación de la conexión a red para facilitar los trámites de las instalaciones de autoconsumo y, especialmente, de aquellas sin excedentes.

Asimismo, José Donoso, director de UNEF, ha señalado que “es esencial que la tarifa que diseñen CNMC y el Ministerio acompañe la transición energética y no genere una barrera al autoconsumo, la eficiencia energética o el vehículo eléctrico. Para ello, debe reducirse el término fijo en función de la potencia contratada e incrementar el variable, lo que nos acercaría a los países de nuestro entorno”.