Los sindicatos CCOO, UGT y USO convocarán movilizaciones en defensa de la industria electrointensiva al caer la interrumpibilidad

Redacción.– Tras los resultados de la última subasta de interrumpibilidad y de la falta de medidas concretas que mejoren la competitividad de la industria de gran consumo eléctrico, tales como son el Estatuto de la Industria Electrointensiva, los pagos por emisiones indirectas de CO2, la reducción de peajes, fomentar las contratos bilaterales, y recuperar la competitividad perdida, CCOO, UGT y USO convocarán movilizaciones en defensa del empleo en la industria electrointensiva, incluyendo una concentración en Madrid el próximo 22 de enero.

Estas movilizaciones vienen motivadas por la ya grave situación de inestabilidad e incertidumbre que este colectivo de trabajadores viene soportando desde hace tiempo. La electricidad constituye el coste de producción fundamental de la industria y la decisión de reducir un 57% la oferta de capacidad interrumpible, no subastando los grandes bloques de 40 MW, ha conllevado que la compensación por prestar el servicio de interrumpibilidad se haya hundido, aumentando el coste de producción para las empresas de España, lo que a juicio de los sindicatos “conllevará la deslocalización de nuestra industria electrointensiva a países de nuestro entorno pues soportamos una brecha de entre 20/25 euros frente a competidores que sí cuentan con mecanismos útiles de reducción de su factura energética.

Por tanto, las organizaciones sindicales hacen un llamamiento a los agentes políticos en su conjunto y, muy directamente, al Ministerio para la Transición Ecológica y al Ministerio de Industria, para que sigan las indicaciones de la Comisión Europea. En este sentido, recuerdan que la industria española se aleja de los objetivos marcados por la Unión Europea y reduce su peso en el PIB del país hasta el 16% cuando el objetivo marcado para 2020 es del 20%, siendo uno de los motivos del retroceso no desarrollar una estrategia política dirigida a lograr unos costes de energía asequibles como máxima garantía de la continuidad de las factorías de la industria electrointensiva.

Es por tanto necesaria una acción de gobierno inmediata y que esta cuestión sea una de las prioridades absolutas no solo del próximo Ejecutivo, sino de las diferentes administraciones, y se pongan encima de la mesa la defensa del empleo y la continuidad de la actividad de los trabajadores afectados. Por ello los sindicatos reiteran su disposición a trabajar conjuntamente con todos los agentes sociales y políticos con el objetivo de avanzar en una solución equitativa que garantice la posición competitiva de la industria electrointensiva española. Asimismo, las organizaciones sindicales hacen un llamamiento a la responsabilidad de las empresas, exigiéndoles que no tomen ninguna medida que pueda suponer una pérdida de puestos de trabajo en ninguna de las plantas afectadas.